La mayoría de los médicos de atención primaria en los EE. UU. están dispuestos a brindar atención de rutina a personas transgénero, pero eso no significa que estén bien preparados para hacerlo, según sugiere un pequeño estudio.
En general, el 86% de los médicos que respondieron estaban dispuestos a brindar atención de rutina a pacientes transgénero y el 79% estaba dispuesto a realizar pruebas de Papanicolaou a hombres transgénero para detectar cáncer cervical, según resultados publicados recientemente.
Sin embargo, muchos médicos informaron sobre la falta de familiaridad con las pautas de atención de transición para personas transgénero, la falta de capacitación en atención específica para personas transgénero, la falta de exposición a pacientes transgénero y la falta de conocimiento sobre pacientes transgénero entre el personal de la oficina, los asistentes médicos o el personal de enfermería.
“Varios estudios han demostrado que las personas transgénero a menudo tienen experiencias negativas cuando intentan acceder a los servicios de atención médica, lo que incluye tener prejuicios, acoso e incluso que se les niegue la atención por completo”, dijo Shires. “Nos dimos cuenta de que nadie había tenido realmente la perspectiva de los proveedores para averiguar por qué estaba sucediendo esto”.
El equipo de Shires envió encuestas a 308 médicos de medicina interna y medicina familiar en un gran sistema de salud del Medio Oeste y obtuvo respuestas evaluables de 140 de ellos.
Los investigadores encontraron que los médicos que habían conocido a personas transgénero estaban más dispuestos a realizar pruebas de Papanicolaou a hombres transgénero. Y los médicos de mayor edad en la encuesta estaban menos dispuestos que sus compañeros más jóvenes a brindar atención de rutina a los pacientes transgénero.
“El conocimiento médico y la experiencia clínica pueden ser menos importantes que el hecho de sentirse personalmente cómodo con las personas transgénero”, dijo Shires. “Por lo tanto, es importante que la educación médica aborde no solo el conocimiento clínico, sino también los prejuicios y actitudes personales”.
John Ayers, un investigador de salud pública de la Universidad de California, San Diego, está de acuerdo.
“La falta de capacitación no se asoció con la disposición a brindar atención, sino que el factor más importante es tener experiencia con personas transgénero”, dijo Ayers, quien no participó en el estudio.
“Durante la década de los 80 y principios de los 90, algunos médicos no estaban dispuestos a atender a pacientes con SIDA, pero a medida que la familiaridad con el VIH crecía, el problema disminuía”.
El estudio se limitó a un solo sistema médico, por lo que los hallazgos podrían no ser ampliamente aplicables, señalan los investigadores.
Fuente: “Many doctors feel unprepared to care for transgender patients.” — Mdlinx
Traducido y editado por el Equipo Editorial de ResidenciasMedicas.com.ar