La provincia de San Juan está atravesando una situación crítica en términos de disponibilidad de médicos especialistas, una problemática que se profundiza con el paso del tiempo y que pone en jaque la calidad del sistema de salud público. El ministro de Salud, Amilcar Dobladez, en una reciente entrevista, abordó este tema urgente, destacando los esfuerzos realizados para contrarrestar la disminución paulatina de profesionales que eligen completar sus residencias médicas en la región.
En el último año, solo el 60% de los cargos de residencias médicas fueron ocupados, dejando vacantes en áreas críticas como pediatría, ginecología y neurología, entre otras. Esta situación no solo afecta la disponibilidad de especialistas, sino que, según palabras del Ministro, “va mediocrizando la salud” en un contexto donde la medicina se vuelve cada vez más especializada.
La provincia ha iniciado un diálogo constructivo con instituciones educativas para encontrar soluciones a esta falta de profesionales. Sin embargo, se enfrentan a desafíos significativos: la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) decidió no abrir la carrera de medicina este año por restricciones económicas, una decisión que impacta directamente en la futura disponibilidad de médicos en el sistema público. Por otro lado, la Universidad Católica de Cuyo tomó la iniciativa de aumentar los cupos en su Facultad de Medicina de 60 a 100, una medida pensada para responder al crecimiento poblacional y a la necesidad de más profesionales en el campo.
Este panorama revela que el incentivo para retener a los médicos recién graduados en la provincia no puede limitarse a aspectos económicos. La formación de un médico, que implica 7 años de carrera universitaria seguidos por 4 años de residencia, requiere de una motivación adicional que Dobladez y su equipo buscan identificar a través de encuestas y estudios. El objetivo es claro: comprender qué puede motivar a los futuros médicos a permanecer en San Juan, fortaleciendo el sistema de salud provincial.
La falta de médicos especialistas es una realidad que demanda una acción inmediata y coordinada. Aumentar los cupos en las universidades es un paso positivo, pero debe ir acompañado de estrategias que aseguren que esos futuros médicos elijan quedarse a trabajar en el sistema público de la provincia. La calidad de la atención médica y la salud de la población dependen de encontrar soluciones creativas y efectivas a esta problemática.
