Seguimos con las entrevistas en ResidenciasMédicas a residentes o ex residentes del sector público. Esta vez la Dra. Gabriela Roces, médica de familia, nos cuenta como fue su residencia en el Centro de Adiestramiento René Favaloro – CARF de la provincia de San Juán.
¿Qué especialidad elegiste? ¿Por qué la elegiste?
Medicina General y Familiar. La elegí porque es una especialidad que no tiene límites. No está limitada por la edad del paciente, ni por su sexo, ni por su etapa en el ciclo de la vida. Siempre podemos realizar algo por el paciente; incluso en aquellos que por su motivo de salud necesitan la intervención de otra especialidad nosotros tenemos algo por hacer: a veces aconsejar, otras acompañar al enfermo, a su familia o a su entorno. También en quienes no tienen esperanza de vida podemos acompañar, colaborar, brindar cuidados paliativos, realizar visitas domiciliarias. Incluso podemos ayudar a aquellos que están sanos! Porque somos especialistas en Prevención.
Es una especialidad que está centrada en la Persona, y no vemos “Enfermedades” sino “Problemas”, lo cual es mucho más abarcante. Miramos no sólo lo físico, sino también lo mental, social y espiritual, porque una Persona es todo eso y de su estabilidad depende su salud y su felicidad.
También es una especialidad que busca ayudar a la población en su conjunto, con muchas actividades comunitarias. Además, nos centramos en la Investigación, especialmente en Atención Primaria, lo cual es todo un desafío. Por otro lado, nos gusta instruirnos en Gestión, ya que nos capacitamos para “hacer lo mejor posible con los medios disponibles”, aprendiendo a utilizar los recursos que tenemos a nuestro alcance de la mejor manera posible.
Es una especialidad que interactúa constantemente, con los pacientes, con la comunidad, con el equipo interdisciplinario, con las otras especialidades. Trabajamos en conjunto con los Trabajadores Sociales, Agentes Sanitarios, Enfermeros, Nutricionistas, Bioquímicos, Psicólogos, Farmacéuticos, Médicos de otras especialidades de los distintos niveles de atención y con todo el que se quiera sumar para el fin común que es promover la salud, evitar la enfermedad, realizar diagnóstico precoz, tratamiento adecuado y rehabilitación y acompañar al paciente, su familia y su comunidad en cada etapa de su vida.
¡Es una especialidad hermosa!
¿Cómo fue tu experiencia en el examen de residencias? ¿Rendiste en otros lugares?
Cuando yo rendí no estaba aún el examen único, así que rendí solamente en San Juan, que era el lugar en donde deseaba ingresar.
¿Dónde es tu residencia? ¿Cuantos años dura?
Hice la Residencia en San Juan. Dura 4 años.
¿Qué hacés en un día común de tu residencia? ¿Cual era la carga horaria?
Depende del año. Nuestro lugar de Residencia era en un Centro de Referencia, de 2do nivel (Centro de Adiestramiento René Favaloro – CARF)
En primer año rotamos por el hospital, en distintas especialidades (Clinica, Cirugía, Gineco, Pediatría, y Centros de Salud), por lo tanto nos sumamos al ritmo de cada lugar. Además, por lo general una vez por semana volvemos a la resi y hacemos algunas guardias en los servicios y otras en nuestro Centro. Teníamos 8 guardias por mes.
Segundo año era el más difícil, porque ya nuestras actividades eran en el CARF y allí aprendías específicamente Medicina de Familia, así que era mucho aprender y aplicar todos los días. Por la mañana rotábamos por consultorio externo de distintas especialidades: cardio, ORL, dérmato, endócrino, infecto, etc… al mediodia volvíamos a la resi para comer y luego actividad académica con clases, revistas de consultorio, ateneos, etc todos los días hasta las 16 hs y luego dependía del día: Teníamos 6 guardias por mes, un día fijo por semana de Consultorio de Medicina Familiar, otro de Cirugía Menor o Plan Mujer según el semestre del año. Además, debíamos preparar nuestras clases, actualizaciones y revistas de consultorio… Era mucho, pero el año de mayor aprendizaje.
En tercero ya había un poco de alivio, también rotábamos por otras especialidades, más actividad en Centros de Salud, al mediodía comer y actividad académica y luego según el día, tu guardia (4 guardias por mes en día fijo), tu día de Consultorio que además eras tutor del de 2do que también hacía consultorio, tutor de cirugía menor o plan mujer… Tenías más responsabilidad, más actividad docente pero menos por internalizar (se supone que ya lo habrías aprendido en 2do).
En 4to año te mandaban a un Centro de Salud periférico, 5 meses cerca, 4 meses lejos, así que era una reestructuración familiar importante para muchos. Lo bueno es que al estar mucho tiempo en el mismo Centro de Salud tenías posibilidad de implementar todo lo aprendido… era la puesta en práctica. En ese año debíamos hacer un trabajo de investigación comunitario que su presentación sería el cierre de la Residencia.
En todos los años teníamos clases y exámenes por módulos. Y la idea era que en todos los momentos participemos en trabajos de investigación.
Eso como días habituales, pero después también participábamos de otras actividades, como operativos sanitarios en inundaciones, viajes a zonas rurales, campañas de prevención y vacunación, y todas las iniciativas de la Resi, del Servicio, del CARF o de los Centros de Salud donde estábamos rotando.
Además, en 3ro y 4to tenías 3 meses de rotación optativa que podías elegir en cualquier parte del mundo, siempre y cuando tenga algo que ver con la especialidad y habiendo establecido los convenios correspondientes.
Ahora las cosas están cambiando un poco en cuanto a las guardias y se busca que el residente rote más por Centros de Salud y consultorios y no tanto por el hospital. La idea es centrarse aún más en Atención Primaria que es el eje de nuestra especialidad.
Algo importante es que al lado de nuestra resi están la de Trabajo Social y Psicología en APS, y en muchas actividades trabajamos juntos, condición que lo hace más útil y productivo, aportando cada uno su visión y sus capacidades.
¿Rotas fuera de tu hospital? ¿Dónde?
Sí, por todos lados!!! (Que, de paso, si hacés buena letra, luego todo el mundo te conoce y tienes más posibilidades laborales)
¿Qué cursos tienen durante la residencia?
Hay muchos cursos. En la Residencia nos hacían participar de todos los cursos que hubiera disponibles acordes a nuestra especialidad: como los cursos TRAPS (de Remediar, Min. de Salud de la Nación), las capacitaciones en Enfermedades Crónicas no Transmisibles (ENT) y de todos los Programas del Ministerio de Salud tanto provincial como nacional.
Además, participábamos de Jornadas, Talleres, y Congresos. Principalmente el de Medicina Familiar y General, pero también te permitían participar de otros como las “Jornadas de Crecimiento y Desarrollo” que se hacen todos los años, los Congresos de Pediatría, de Salud Cardiovascular de la Mujer… o lo que te guste.
Capacitaciones de cuidados paliativos, vacunas, gerontología, oftalmología, investigación, gestión…. Lo que quieras! Porque como la especialidad es tan amplia te permite crecer en muchas áreas.
También, por lo general en 3er año, como por “convención” la mayoría hacíamos el Curso Superior Universitario PROFAM, propio de nuestra especialidad.
Además, todos los años nosotros los Residentes junto con el Servicio de Medicina Familiar organizábamos las Jornadas de Medicina Familiar, de 2 días de duración, lo cual implicaba mucha organización, programación, invitados especiales, etc. Durante 2do año todos los residentes debíamos generar una actualización tipo CORE para presentar en dicho evento, y los de 3ero ayudaban a los de 2do en esta actividad.
¿Cómo es la vida social de un residente de tu especialidad?
Eso depende de lo que interpretes como “vida social”. Alli en la Residencia vivís rodeado de tus compañeros / amigos y muchas otras personas que comparten la vida y el espacio de trabajo con vos. Después, depende de tus actividades fuera de la Residencia, la familia, los demás amigos, la iglesia, o lo que te guste hacer.
Obviamente, en la Residencia estudias y trabajas a la vez, es una especialización, un posgrado, por lo tanto hay que tomarlo con responsabilidad y demanda tiempo. Pero hay que aprender a utilizar los tiempos sabiamente para poder establecer prioridades tanto adentro como afuera de la Residencia y cumplirlas.
¿Cuál es la salida laboral una vez terminada? ¿Cómo es la remuneración?
Como médico de Familia podés trabajar en muchos lugares, tanto públicos como privados. Podés elegir el medio del campo, el centro de salud de un pueblito o de una gran ciudad o un consultorio externo de un hospital de cualquier complejidad. Podes dedicar parte de tu tiempo a la investigación, la docencia o la gestión. Podés generar trabajos comunitarios y ponerlos en marcha, podés estar entre los que escriben libros y generan guías de práctica clínica. En la provincia que yo me formé, muchos cargos jerárquicos en Salud Pública los tenían los médicos de Familia, y también en las Zonas Sanitarias, o como Directores de Hospitales y Centros de Salud, y en el Ministerio de Salud de la Nación también es así porque la visión que nos da la especialidad nos capacita para ser útiles en esas áreas.
Podés aspirar a muchas cosas, depende de lo que te guste hacer y creas que es tu lugar en el mundo. Siempre que uno haga lo que desea va a trabajar mejor y más feliz.
La remuneración es muy variable, depende del lugar donde estés. También depende de tus necesidades personales que te parecerá poco o mucho. No es lo mismo si necesitas un trabajo estable para mantener una familia que si vives con menos responsabilidades económicas. De todos modos, no me parece que la remuneración sea lo más importante para elegir la especialidad… hay que pensar que luego harás eso toda tu vida… y es mejor que te guste.
Sin embargo, en San Juan, los sueldos de Residentes eran bastante buenos en comparación con otras provincias.
¿Algún consejo para quiénes van a rendir examen de residencias?
Elegí pensando. Cada uno sabe qué es lo que le gusta. Pensá si te gustaría más estar en un hospital o un Centro de Salud. Si te gusta estar en contacto con la gente o preferís el silencio, si te gusta más salir a la comunidad o estar detrás de un escritorio, si te gustan los procedimientos invasivos y la urgencia o el consultorio. Hay gustos para todas las especialidades y todas son necesarias. Pensá si serías feliz haciendo eso toda la vida y si crees que con tu especialidad y tus talentos puedes ser útil para los demás, porque ello es la mayor satisfacción que puede tener un Médico.
Y si no te gusta la rutina… elegí Medicina de Familia!! Siempre hay algo novedoso y desafiante para hacer!!
¿Algo que quieras comentarle a alguien interesado en tu especialidad o en hacer la residencia en el mismo lugar que vos?
La Residencia requiere mucho compromiso y esfuerzo, pero vale la pena. Es una posibilidad de formación muy importante, pero hay que saberla aprovechar. Que tu paso por la residencia sea para crecer intelectualmente, profesionalmente, pero sobre todo como persona, para brindarte a los demás.
Podés elegir pasar la residencia sufriendo y quejándote por todo, haciendo lo menos posible para pasar de año o sacarle el jugo, aprender, buscar, crecer y aprovechar cada oportunidad que se te presente. Eso fue lo que yo decidí, y ya habiendo finalizado hace pocos meses, siento que valió la pena tanto esfuerzo!!
Actualmente, por cuestiones personales, me vine a vivir a General Alvear, Mendoza. Desde que llegué me ofrecieron trabajo por todos lados: en el Hospital, en los Centros de Salud, en la parte privada, en Docencia….
Estoy trabajando como Médica de Familia en Consultorios Externos del Hospital y soy parte del Comité de Docencia e Investigación de la institución.
Aquí, hay Residencia de Medicina Familiar, pero desde hace varios años ya no hay Residentes, porque no se inscriben (a la cual se accede rindiendo el examen de la provincia de Mendoza)
La idea es reflotar la Residencia aquí y que pueda volver a ser un Centro formador de Médicos de Familia. Queremos poder hacer una Residencia de buena calidad académica, donde uno pueda aprender mucho y crecer sin morir en el intento… porque se puede! Que los Residentes que vengan disfruten de la Medicina, amen su especialidad y a la vez puedan disfrutar de las otras cosas de la vida: sus familias, sus amigos y todo lo demás.
Así que te invito a conocer nuestra Futura Residencia de Medicina Familiar en Facebook: Residencia de Medicina Familiar – General Alvear – Mendoza.
Y si venís…. ¡Yo seré tu Jefa de Residentes!
También hay posibilidades de hacer alguna rotación o pasantía como para conocer más de cerca. Es cuestión de que te contactes con nosotros.
¡Te esperamos!